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viernes, 16 de julio de 2010

Carmen y Esperanza unidas por un barrio. Diego Benítez

Hace ya once años que un ángel bajó del cielo para posarse en las manos de un joven escultor y concebir a la consoladora de los pecados y protectoras de los alcores, la que lleva por nombre Esperanza.
María Santísima de la Esperanza de El Viso del Alcor fue concebida y anclada en un barrio, sin mar ni pescadores, pero con arraigo marinero y protegido por la Virgen del Carmen.
Pero su anclaje duró poco en este barrio, que durante unos meses se convirtió en Getsemaní, en un jardín florido lleno de olivos, del cual tuvo que partir, a igual que parte el marinero en su barquita en busca de nuevas tierras. Y allí estaba Ella, en su camarín, la Virgen del Carmen, esperándola con sus mejores galas, para preguntarle por su barrio, su gente…, y allí, junto al camerín de la Madre del Carmelo creció, y le enseñó su sabiduría, le dio el calor de una madre y hasta le dejó su casa cuando Ella tuvo que salir.
El día 17 de mayo del pasado año, María Santísima de la Esperanza regresó a su barrio marinero, pero esta vez para quedarse y anclarse de nuevo en su barrio, en su Capilla, y cuidar de su gente, dejando atrás a su capitana, la Virgen del Carmen.
Pero la ausencia tardó poco tiempo; dos meses después, el día 18 de julio, en una jornada festiva para la Hermandad del Carmen y la Agrupación de la Esperanza, la Virgen del Carmen procesionaba entre olor a incienso y sones celestiales de la banda de música hasta su barriada, y ahora era Ella, la Reina del Monte Carmelo la que iba a visitarla a su barrio, a su Capilla, y hasta llevó en su paso su nombre, un cirio votivo en homenaje a todos los donantes de órganos con el lema “Vida y Esperanza”.
Desde nuestra Agrupación queremos dar las gracias a la Hermandad de Nuestra Señora Carmen por ofrecernos esta página y poder contar aquel maravilloso día para ambas corporaciones y sobre todo por llevar a la Reina y Madre del Carmelo a las mismas puerta de la Capilla de María Santísima de la Esperanza.
Nota: Artículo publicado en el Boletín Informativo número 10, julio 2010 de la Hermandad del Carmen de El Viso del Alcor.
Foto: Belén Jiménez