El Día de los Santos
Inocentes es la conmemoración de un episodio hagiográfico
del cristianismo: la matanza de los niños menores de dos años nacidos
en Belén (Judea), ordenada por el rey Herodes I el Grande con el
fin de deshacerse del recién nacido Jesús de Nazaret.
Es muy corriente la explicación de la Navidad y demás fechas
alrededor de esta como fechas arbitrarias, pues estas no figuran en los
evangelios. Según el evangelio, Zacarias supo que Isabel estaba encinta de Juan
el Bautista mientras cumplía con la obligación de quemar incienso en el Templo,
que debía hacer cada grupo sacerdotal dos veces por año. Zacarías pertenecía al
octavo grupo, el de Abías, lo cual nos da dos posibles fechas para la
concepción de Juan el Bautista, una a mediados de mayo y otra a mediados de
noviembre, ninguna de las cuales coincide con la tradición.